• Tener charlas sociales
identificando las necesidades de igualdad entre mujeres y hombres: La equidad de
género permite brindar a las mujeres y a los hombres las mismas oportunidades,
condiciones, y formas de trato, sin dejar a un lado las particularidades de cada
uno(a) de ellos (as) que permitan y garanticen el acceso a los derechos que
tienen como ciudadanos(as).
• Analizar las fortalezas en el trabajo de las
compañeras respecto de los hombres: Aprovechar esas fortalezas de las compañeras
es una cuestión fundamental para la administración. Al fin y al cabo, de ellas
puede depender el nivel de productividad las compañeras y el ambiente laboral en
el centro, sintiéndose valoradas e incluidas.
• Denunciar casos de sexismo o
acoso: Teniendo una guía de prevención y detección del acoso sexual, acoso
sexista, acoso por orientación sexual e identidad o expresión de género.
•
Exigir cultura de igualdad en el trabajo: Para conseguir que tanto mujeres como
hombres obtengan las mismas oportunidades, los mismos derechos, el mismo trato y
las mismas responsabilidades
• Hacerles ver a las universitarias lo valiosas que
son.
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